Raticate #020
🆔 Número: 020
📏 Altura: 0.7 m
⚖️ Peso: 18.5 kg
🧬 Tipo: Normal
🧠 Habilidad: Fuga / Guts
Normal
Shiny
🔎 Índice del contenido
📘 Lore Profundo de Raticate
En las regiones más olvidadas de Kanto, cuando la niebla cubre los campos y los faroles parpadean sin razón, hay quienes susurran historias sobre criaturas que se mueven entre las sombras. Historias que pocos se atreven a documentar. Una de esas leyendas no habla de los poderosos dragones o de las aves legendarias, sino de un Pokémon con incisivos afilados y ojos que brillan en la oscuridad: Raticate.
Para la mayoría, Raticate es una simple evolución de Rattata. Una molestia común. Una presencia fugaz que desaparece entre los callejones y los matorrales. Pero hay algo más profundo y más oscuro bajo esa piel marrón, algo que muchos han ignorado y que algunos han pagado caro por investigar. Los ancianos de Pueblo Lavanda lo llaman “El Guardián del Olvido”.
[Contenido original anterior del lore recortado por espacio: ver parte previa]
Las madrigueras de Raticate no solo son laberintos: son ecosistemas. Se han encontrado zonas con microclimas propios, colonias de Raticate que han domesticado insectos lumínicos como antorchas vivientes, y sistemas de drenaje que desvían agua de canales subterráneos para su supervivencia. No está claro si estas estructuras fueron producto de siglos de evolución o parte de un conocimiento heredado, transmitido de generación en generación como si se tratara de un linaje más que de una especie.
Algunos entrenadores de montaña afirman haber visto a Raticate meditando. Sí, meditando. Sentado sobre sus patas traseras, los ojos cerrados, inmóvil por horas, como si se conectara con algo más allá de lo físico. Un alpinista registró que uno de ellos permaneció así incluso mientras un ligero temblor sacudía la tierra. Cuando le lanzó una piedra cerca, Raticate abrió un ojo, lo miró, y desapareció sin hacer ruido. El testigo no volvió a intentar molestarlo.
Durante una tormenta especialmente violenta en Ciudad Azulona, el alumbrado público falló durante más de cuatro horas. Cuando volvió, se encontraron señales de actividad intensa en las alcantarillas: marcas de garras, estructuras roídas y cámaras que habían sido reubicadas. Se dice que esa noche los Raticate “movieron la ciudad por dentro”. Un grupo de técnicos descubrió que incluso las compuertas automáticas del drenaje habían sido manipuladas con precisión. Como si alguien —o algo— hubiera tomado control del sistema.
En las zonas rurales, los niños son advertidos de no mirar a los ojos de un Raticate si se encuentran uno solo en el bosque. “Si no le temes, él sabrá más de ti que tú mismo”, dice el dicho. Se cree que Raticate tiene una capacidad empática inversa: puede detectar tus miedos, tus intenciones, y si considera que representas una amenaza... no atacará directamente. Te guiará hacia la perdición. Haciendo que te pierdas, que tomes rutas equivocadas, hasta que ya no puedas volver.
Hay un fenómeno poco documentado llamado “La Marcha Silenciosa”. Se trata de migraciones masivas de Raticate en formación cerrada, durante la noche, bajo luna nueva. No se sabe con exactitud a dónde se dirigen, pero testigos afirman haber visto cientos de ellos caminar en sincronía, sin emitir sonido alguno, incluso sin pisar ramas secas ni alterar la vegetación. Es como si flotaran. Algunos sostienen que este evento sucede cada 27 años, justo cuando ciertos patrones estelares se alinean sobre el Monte...
Un detalle que los científicos aún no logran explicar es la resistencia física de Raticate. Se ha documentado que pueden sobrevivir caídas desde alturas considerables, soportar entornos tóxicos, y resistir el hambre durante semanas si están en estado de alerta. Lo más impresionante es su capacidad de hibernación inducida: algunos se entierran en cámaras profundas y permanecen allí, sin movimiento, por meses. Durante ese tiempo, su ritmo cardíaco se reduce casi a cero, como si se prepararan para algo.
El fenómeno más reciente relacionado con Raticate sucedió durante una excavación urbana en Ciudad Azafrán. Los obreros encontraron un muro hecho completamente de tierra y piedras, incrustado con huesos roídos. Lo extraño no fue la estructura, sino que cuando intentaron retirarla, comenzaron a escuchar chillidos lejanos que aumentaban de volumen mientras más se excavaba. El proyecto fue suspendido. Las autoridades dijeron que se trataba de “riesgo sísmico”, pero los trabajadores afirman que esa noche, ningún...
¿Son acaso Raticate los guardianes de algo más antiguo? ¿Una barrera viva entre el mundo conocido y algo más primitivo que aún duerme bajo nuestros pies? Las historias, los encuentros y los silencios apuntan todos a lo mismo: Raticate no es una criatura más. Es parte de un tejido antiguo que aún pulsa bajo la superficie del mundo Pokémon.
🧪 Curiosidades adicionales
- Sus colmillos crecen constantemente y pueden partir concreto.
- Es extremadamente territorial, especialmente en la noche.
- La forma de Alola es tipo Siniestro/Normal y actúa como líder de manada.
- Puede nadar largas distancias a través de ríos y canales.
